Cómo decidir: estudiar solo versus estudiar en equipo
Al considerar los pros y contras de estudiar solo frente a unirse a un grupo, todo depende de tu propio estilo de estudio y de tu eficiencia. Las preguntas que debes hacerte al tomar esa decisión incluyen:
¿Cuánto trabajo haré solo y cuánto en equipo?
Algunos estudiantes hacen más rápidamente las cosas cuando estudian por sí mismos, abordando un tema tras otro. Otros pueden encontrar que asignar temas por miembro del equipo y presentar cada tema les funciona mejor, y hacen más en menos tiempo si están bien acoplados
¿Me distraigo más o menos cuando trabajo en grupo?
Todos nos hemos distraído mientras tratamos de hacer algo, ya sea a causa de nuestros teléfonos o por charlar demasiado con los otros miembros del equipo. Lo importante es lo que concentra nuestra atención, ya sea nuestra propia disciplina o la responsabilidad ante los demás.
¿Necesito leer las cosas por mi cuenta, o las memorizo mejor cuando alguien más las explica?
Algunos estudiantes necesitan leer y digerir las cosas por sí mismos, mientras que otros comprenden de forma más completa cuando otra persona explica algo en palabras sencillas o da un apoyo de memoria para retenerlo mejor. Todo depende de cómo estudies mejor, y podrías incluso utilizar una combinación de ambos métodos.
Hacerse estas preguntas puede ayudar a definir si un equipo de estudio te puede funcionar o no. Algunos beneficios que se pueden obtener al trabajar en grupos de estudio son:
- ser más responsable por el hecho de trabajar con otras personas
- ser más productivo ante otros que también están trabajando
- poder comunicar ideas o temas en un entorno de grupo
Tener a otros que también están estudiando o ejecutando tareas similares puede contribuir a mantenerte enfocado en lo que hay que hacer. A veces nos podemos distraer al trabajar solos, y tener otras personas trabajando a tu alrededor también puede influir para hacer lo que necesitas en ese momento. Hay quienes disfrutan al revisar materiales juntos, y eso puede hacer que se mantengan atentos y disciplinados para completar el trabajo en cierto tiempo, en lugar de distraerse charlando.
Estudiar en equipo tiene también algunos contras. Algunos pueden preferir estudiar solos, ya que avanzan más de esa manera. Si los miembros de un equipo pierden la concentración durante una sesión de estudio, pueden hacer largas pausas y no realizar su trabajo, o desviarse tanto del tema que la sesión se convierta en una conversación que continúe por más tiempo del necesario.
Es importante recordar que el propósito de estudiar en equipo es completar el trabajo.
A veces, estudiar solo puede ser desalentador, especialmente con la pesada carga de trabajo que conlleva la escuela de medicina, y ahí es donde los equipos de estudio pueden ser útiles para cambiar las cosas.
¿Qué hace un buen grupo de estudio?
Si estás considerando unirte o formar un equipo de estudio, es importante que seas compatible con los demás miembros del grupo. Un buen equipo de estudio está formado por personas que tienen metas compartidas y pueden trabajar juntas en un ambiente amistoso. Esto significa que no haya interrupciones ni competencia entre los miembros, especialmente cuando trabajen juntos en algún material. Es importante que los participantes del equipo se apoyen unos a otros, entiendan cuando surge un imprevisto y estén atentos para asegurarse de que todos se mantengan al día.
Algunos consejos que pueden ser útiles para formar un buen equipo de estudio, o para saber si es bueno ese al que estás considerando unirte, caen bajo lo que llamo las cinco Cs: compactación, concisión, contribución, cooperación y coherencia.
- Para ser compacto, el grupo debe estar formado por entre tres y cinco miembros. Los grupos más grandes pueden generar distracciones.
- El estudio en equipo debe ser conciso. Una forma de lograrlo es fijar un tiempo para el repaso. Una hora o menos puede ser muy poco, mientras que un tiempo más largo puede disminuir la productividad. Es bueno averiguar, a través de la prueba y el error, qué tiempo funciona mejor para todos.
- Cada miembro del equipo debe estar dispuesto a participar y contribuir. Esto permite a todos estar preparados y activos durante las sesiones. Todo el mundo debe presentar un tema, ya que esto les permite enseñar y refuerza sus propios conocimientos. Escuchar una explicación de otra persona también mejora la comprensión y puede traer una perspectiva diferente a aquella con la que estamos familiarizados.
- El trabajo en equipo requiere de una adecuada cooperación. Es vital que todos se lleven bien y puedan comunicarse, no solo en lo que se refiere a los conocimientos, sino también en la planificación y el apoyo. Es importante estar bien acoplados para crear un entorno de estudio amigable y productivo.
El grupo debe reunirse en horarios coherentes. Es buena idea tener un tiempo designado para reunirse diaria o semanalmente cuando se estudia en equipo. Esto ayuda a mantener el material fresco en la memoria y hace que todos los miembros del equipo se sientan responsables de hacer las cosas en tiempos determinados, y estén siempre listos para las sesiones de estudio.
Mi experiencia con los equipos de estudio
Prefiero una mezcla saludable de estudio en grupo y estudio en solitario, especialmente cuando me preparo para los exámenes de las juntas médicas. Durante el día, estudio el material por mi cuenta y creo una lista de verificación de lo que necesito hacer. Más tarde, me reúno con un compañero o equipo de estudio y vemos juntos el material, comparando nuestras respuestas cuando son diferentes y comunicándonos para entender nuestras perspectivas.
Puedes acertar en algo en lo que otro estudiante se equivoque, y viceversa.
Durante las sesiones, puedo escuchar a los demás y analizar sus procesos de reflexión cuando proponen sus respuestas para los exámenes de práctica. Esto me ayuda a consolidar lo que sé y no sé al final de la sesión. Escribo lo que necesito repasar durante las sesiones y lo reviso en mi próximo día de estudio. ¡Enjuagar y repetir!
Sé que tengo que revisar los contenidos por mi cuenta para procesar y digerir lo que estoy aprendiendo. Sin embargo, desde que empecé a trabajar en equipo, me he sentido más enfocada que antes. Esto se debe a que mis compañeros de estudio me hacen sentir responsable, reforzando mis obligaciones antes de reunirnos cada tarde. También siento que he aprendido mucho de los demás, y me siento más confiada en mis propios conocimientos sobre temas en los que estaba insegura, lo que disminuye mi síndrome del impostor.
Los equipos de estudio pueden ser muy útiles. ¡Si eres como yo, un buen equilibrio entre trabajar solo y hacerlo en grupo puede funcionarte muy bien! Se trata de comprenderte a ti mismo y el tipo de entorno de estudio y las interacciones en las que te sientes mejor, así como de identificar con quién podrías formar un equipo de estudio y cómo organizarlo. ¡Recuerda mantener el grupo compacto, las discusiones concisas, las contribuciones equitativas, los miembros cooperativos, y tiempos coherentes de reunión!
